Sinécdoque, la tercera hija

Porque yo crecí con una sinécdoque entre mis labios. Era tan sencilla que traerla aquí me da un poco de vergüenza. Fue la primera sinécdoque que conocí, y era tan sabrosa, y me sentaba tan bien después de cenar… Mamá, ¿me traes un danone? En realidad lo que quería era un yogur; Yoplait ya había perdido la batalla. Hasta hoy. Hoy vamos de sinécdoques. Escribía … Continúa leyendo Sinécdoque, la tercera hija