Este texto forma parte del conjunto de ejercicios propuestos por Brian Kiteley en La epifania de las 3 A:M, Pálido Fuego, 2018. La tarea a la que me someto está explicada en la primera entrada de la serie, «A mi jeringuilla». El resto de los ejercicios escritos por el autor quedarán archivados en la categoría de este blog «La epifanía de las 3 A:M».
Imagen destacada de «Judit en el banquete de Holofernes», de Rembrandt, 1634.
El relato, siendo un primer borrador, me parece espléndido. Con ligeros retoques, lo consideraría incluso brillante. Me encanta, sobre todo ese espléndido final (¿mejor con unos puntos suspensivos para indicar que acaba ahí?). Enhorabuena.
Eso sí, el relato no cumple lo que pide el ejercicio. El narrador es confiable: lo que nos cuenta parece cierto. Quien no es confiable es la tía, pero ella no es la narradora del relato. Si lo contase ella, otro gallo cantaría.
De todos modos, lo que no valdría para el ejercicio, te aconsejo que lo guardes, lo pulas y lo conserves como un relato más que válido para concurso o para ponerlo en una antología (o simplemente para conservarlo).
Me gustaMe gusta